«Job blows»
¡Ajá! Si tú también has expandido esta cabecera en tu agregador de RSS movido por la calentura disléxica del título es muy probable que esta entrada se convierta en la más leída de mi bitácora. Todo gracias al mismo truco sucio y barato —pero efectivo, pardiez— que usan constantemente ciertos periódicos.
La portada de hoy de The London Paper (¿por qué después de 20″ con ese sitio web abierto mi Firefox acapara el 80% de UCP? :¬P ):
«Job blows for sex in City banking»
Ahí queda eso.
¿No es ruín? Evidentemente tú, que llevas en el cuerpo ocho horas seguidas pensando en lítel endian, tienes ya todas las convoluciones del cerebro con forma de rama de Subversion. Pero hey, aún eres un ser humano. Así que toda esa masa encefálica obligada contra natura a producir ActionScript en lugar de parafilias se rebela de pronto y consigue hacerse fuerte en algún lóbulo esquinado. Algo en ese titular parpadea en fosforescente, así que intentas descifrarlo leyendo con el rabillo del ojo de forma exquisitamente descarada en el periódico de otro currito, a la manera canónica del metro.
Evidentemente, la noticia no es tan interesante como parecía. Lo cual me recuerda una noticia de hoy en /. que muchos también leímos mal (“immoral”? who said “immoral”?).
Precisamente hace pocos días comentaba con un amigo lo frecuentes que son aquí los juegos de palabras, a veces bien ingeniosos, en los periódicos sensacionalistas, y también en los diarios gratuitos que reparten en todos los nodos del transporte urbano. Pablo me explicó que en UK es mucho más fácil hacer estos juegos, principalmente porque el inglés tiene más palabras homófonas (ya sabes, esas palabras que odian a los maricones) que el español. La verdad es que los periodistas también lo consiguen a base de rebajar su listón de la seriedad, de forzar referencias y de echar mano del S · E · X · O, que siempre es un recurso facilón. S · E · X · O S · E · X · O S · E · X · O
Unos cuantos ejemplos.
¿Os acordáis del tipo que se propuso adelgazar jugando con la Wii? El pie de foto del «Metro» fue:
«Fat boy slims»
Que es muy rebuscado, pero tiene su gracia.
Otro. Con el cambio de año, la Corporation of London, que a su vez controla Transport for London, incrementó alevosamente las tarifas de los ferrocarriles. Por obra de Ken «Livingstone, I presume» (el superalcalde de Londres). El titular:
«Train fares are not fair»
(Léelo en voz alta si no lo notas).
Y el último, que también lo he visto hoy. Hablando de Petr Čech, el portero checo del Chelsea:
«Czech in for Petr»