トリプの日本 一
きのうこのビデオをしました。しゃしんはきょねん私の日本にりょこうでとったしゃしんです。おんがくは川井憲次の「GHOST IN THE SHELL」のソウンド-トラックです。 ところで今日日本語のじゅぎょうをさいかいしました!
きのうこのビデオをしました。しゃしんはきょねん私の日本にりょこうでとったしゃしんです。おんがくは川井憲次の「GHOST IN THE SHELL」のソウンド-トラックです。 ところで今日日本語のじゅぎょうをさいかいしました!
Richard Dawkins prompts me to a moral dilemma that is also a paradox: I want to worship Richard Dawkins as a god, but I can't because I am an atheist myself.
Frases oídas esta noche en un bar de Londres durante la final de la Eurocopa: «¡Maricón, vuelve a Cataluña!» Esto lo gritó al jugador Xavi uno que había a mi lado. Inmediatamente, otro que estaba cerca se volvió hacia él con cara de disgusto. Entonces el que había gritado empezó a explicarse y a darle palmaditas de buen rollo en la espalda al catalán. Y le oí decir «no, ¡si yo soy vasco!». O sea, que él también se siente oprimido por el Estado Español, así que todo queda entre hermanos. «¡Alemán, hijo de puta!» El deporte, uniendo a las naciones y a los pueblos. «¡España: una, grande y libre!» Esta frase es bonita, pero me suena haberla oído antes en algún sitio, así que como cántico es muy poco original. «¡España! ¡España! ¡España!» Para empezar, estas frases están incompletas, porque no tienen predicado. Tienen un sujeto, pero no tienen un predicado. Me quedé con la intriga de saber qué quería decir la gente con esto. Podría ser «España comparte frontera con Portugal». O bien «España tiene seis letras». O «España da asco», o cualquier otra cosa. Lo más curioso de todo es que el vasco de antes también se desgañitaba gritando esto cuando el partido terminó. «¡Este partido / lo vamos a ganar!» Aún admitiendo que hubiese algún jugador en el bar, no sé cómo pretendía ganar el partido a 900 km de distancia. Lamento profundamente que mi racionalismo cuasi-enfermizo, mi tendencia a no disgustar a los demás si no tengo un buen motivo y mi falta de apego por los colorines me impidan en días como hoy sentirme genuinamente feliz, pasármelo bien y hacer amigos. Creo que esto ya no lo voy a poder cambiar nunca.
I must confess that two days ago I had no idea who George Carlin was. I got to know him only yesterday, thanks to one of @ampajaro's tweets announcing his death first thing in the morning. That was followed by a chain of entries coming from a few of the blogs I (helplessly try to) keep up with. I have read such striking superlatives about this comedian that I youtubed him. After watching a few of his routines I now feel that I have to share and honour his talent. So here you have two pieces of different shows by George Carlin. Caution — strong opinions (and language) ahead. The first video is basically about religion being a pile of bullshit (kudos, we need more of that nowadays):
The second video is a somewhat furious yet brilliant sermon against those who are against abortion. (I personally don't agree with all of what Carlin says in this video. I am not against abortion. But unlike most of other left-wing people I know, I am not that sure that I am undoubtfully in favour of abortion, either. Also, I don't buy the theory that equates abortion to women's rights, and to “the choice of one woman”. In any case, I'm an atheist and my position has nothing to do with religion, tradition or customs, so I very much support — and enjoy — Carlin's mockery of religion's mean and simplistic approach to abortion):
What I admire the most about George Carlin is the technique — the round,
perfectly-delivered script. He can speak for ten minutes without
stumbling over a single syllable, without humming or hesitating. Weaving
long enumerations of words or examples, putting the stress in the right
place and stopping precisely where required. And I love his strong and
brave position on issues as sticky as religion, politics, taboos,
gender, death, PC language and abortion. Even if at times he looks more
like a fanatical preacher than a comedian and some of his arguments seem
debatable to me. But hey, conservatism needs to be balanced. Don't miss
his “Seven dirty words"
routine
(“shit, piss, fuck, cunt, cocksucker, motherfucker, tits”), which
apparently caused a radio station to be sued and sparkled a major debate
about censorship in the American airwaves. Here, the video audio
in
YouTube.
My teacher training course took to an end. We still have to hand in a portfolio with some papers next week. But we already know that we all passed the course and that we are getting our certificate. Well deserved, because we worked really hard during these 11 weeks. That has been a crazy time for me — more than once I have been sleeping ridiculous number of hours several days in a row. I'm proud that I suceeded in balancing that with my new job. As I'm sure my classmates are proud of themselves, too. I am also thankful to the few people who are close to me and bore my misanthropy during these weeks. But we had many good laughs, too. And I met some interesting people (students, teachers and meta-teachers). In total, we were eight teachers of Spanish (of whom four Spaniards, three Colombians, one Argentine) three Italians and three French. This week we have been celebrating, also with our students. These are some quotes I heard and wrote down during the course.
“Si la violación es inminente, relájate y goza.”
— Fernando.
“Acabo de tener una epifanía.”
— Fernando.
“Un presente como los de antes.”
— Fernando.
“Yo no quiero que mis niños se críen con Bob Esponja y con Dora la
Exploradora*; quiero que tengan su mamá.”*
— Ana.
“Siamo un binomio vincente.”
— Isacco.
“Si italiana & francoparlante responden a todo, pero inglesa a nada →
algo falla.”
— In my notes.
“El subjuntivo: parte del problema está en la «fama» que tiene.”
— In my notes.
“TRUCO DEL ALMENDRUCO. Cómo enseñar a principiantes a expresar
opiniones SIN usar el subjuntivo.”
— In my notes.
“Depende del contexto.”
— The Universal Answer For All Linguistic Matters.
“Intentamos «esconder» al autor del error.”
— In my notes.
“El [pretérito] indefinido está bien.”
— Begoña.
“El pretérito indefinido es un pasado puro, ¿no?”
— Begoña.
“El imperfecto es el presente del pasado.”
— Vicens.
“Metapregunta [im]posible de un estudiante: «¿qué significa ‘¿qué
significa?’?»”
— In my notes.
“Hacerás.”
— Author unknown.
“No sé si ustedes lo conozcan.”
— Ana.
“Sí. El matrimonio.”
— Fernando, being asked whether there is a cure for love.
Adorable stuff to shift your mood. My muxtape:
tripu.muxtape.com
Una de tantas iniciativas geniales que
tienen en mi nueva
empresa es la que
llaman «Mind you». Cada mes, unos catorce empleados crean una especie
de presentación sobre sí mismos. Cada uno diseña una hoja, o pantalla.
(¿Cómo demonios se dice «slide» en español? Y no me digáis
«diapositiva»…). Se trata de reflejar tu personalidad, tus
parafilias preocupaciones, intereses e inquietudes, con
proporción 4:3, de forma libre y creativa. Cada hoja se imprime
entonces en formato A2 y todas se cuelgan en la pared de un pasillo
(casualmente, el que está junto a mi sala de
trabajo).
Además, se junta todo en una presentación que se comparte en la
intranet hasta el mes siguiente. Como soy de los más nuevos en la
empresa, hace unos días la gente de RRHH me pidió que participase en la
próxima tanda de carteles. Así que me puse a pensar en ideas para hacer
un buen cartel que hablase de mí mismo y de mi mecanismo. Los carteles
que he visto colgados en la pared durante estas semanas son muy
variados. Abundan los collages de fotos con familia y amigos. Otros
hacen un popurrí de imágenes relacionadas con sus aficiones, de
fotografías de su último viaje o cosas así. También hay alguna ristra
de citas. Unos pocos son realmente originales y están muy bien
compuestos. Yo quería hacer algo medio original. Por supuesto, la
primera idea me vino inmediatamente; después de todo, es facilísimo
resumir lo que hay en mi cabeza con una sola imagen
[NSFW].
O con dos imágenes
[NSFW],
a lo más. Sin embargo, por algún motivo descarté la idea. Pensé que
quizá no era apropiado que mis doscientos compañeros de trabajo me
asociasen a esa imagen. Je. Así que reprimí mi verdadera naturaleza,
aparqué las pulsiones primarias e intenté centrarme en «lo demás». Que
algo hay. Hace tiempo que pienso que las nubes de etiquetas que uno va
construyendo en sitios sociales y agregadores son una magnífica
descripción de uno mismo. Una descripción distorsionada por el propio
medio, es cierto. Pero si usas las etiquetas correctamente, después de
cierto tiempo es difícil que quede algún aspecto principal de ti mismo
sin reflejar en forma de etiqueta. Quería llenar el cartel con alguna
fotografía de las que
amo.
Elegí una de las obsesiones de esta etapa de mi vida, Tokyo, y busqué
entre mis fotos de Japón. Ninguna era lo suficientemente buena; mucho
menos para imprimir en grande. Tras mucho buscar opté por una foto ajena
de Shibuya. Ya tenía un fondo con mucho contraste; oscuro y lleno de
neón. Pero a la vez quería inundar el cartel con etiquetas. Empecé a
acariciar la idea de saturar todo el espacio con información. Con la
colaboración de Google
Images
junté unas cuantas cosas que me son queridas. Pero si las pegaba todas,
unas junto a otras, terminaba con un collage ortopédico, y no quería
eso. Decidí que mis etiquetas en
del.icio.us eran más
descriptivas que las de
Flickr.
Tenía curiosidad por ver cuántas capas de información (texto e imágenes)
se pueden superponer sin perder la legibilidad de ninguna capa. Si mi
experimento sirve para algo, la respuesta es «dos» :¬) Solo me permití
añadir una referencia a «Blade Runner» fundiéndose por la izquierda,
y superpuse 日本語 («japonés», escrito en ídem) en la parte derecha.
Después jugué un poco con las máscaras de transparencia, los niveles de
cada capa y algunos efectos, hasta que me gustó el conjunto. Todo esto,
por supuesto,
Gimp
mediante. Alabado sea mil veces.
«Me siento muy orgulloso de que Tricky, Massive Attack o Chemical Brothers hayan permitido que sus discos se hayan estrenado mundialmente en Siglo XXI antes que en ningún rincón del mundo. También es verdad que todos estos artistas encontraban asombroso que hubiera una emisora que a las once de la mañana y en difusión nacional pusiera sus canciones.»
Los enamorados de Radio 3 de Radio Nacional de España somos unos sufridores. Nos hemos acostumbrado ya a vivir permanentemente con una corazonada agorera. Cada vez que el gobierno del país cambia de signo, cada vez que hay un nombramiento en RTVE… nos ponemos en lo peor. «Ya está», nos decimos. «Ahora sí; esto se acaba». En estos días el corazón se nos estruja un poquito otra vez. Hablan los papeles de cambios gordos que se avecinan en Radio 3, cambios de personas y cambios de ideas, y a ninguno nos sorprende. Parece que no se habla de cerrar la emisora, cierto. Pero, ¿qué diferencia hay entre cerrarla y mantenerla abierta con el mismo nombre pero cambiando completamente los contenidos? Manel Fuentes no tiene ningún sentido en Radio 3. No es una cuestión de calidad —el señor Fuentes es muy competente haciendo lo suyo— sino de oportunidad. Es como si Ramón García empezase a escribir guiones para las historietas de El Jueves. Estas son las 3 razones por las que RTVE y el gobierno deberían conservar Radio 3 con el mismo espíritu que tiene desde hace 30 años:
On Sunday, two videos that struck me recently. One video for the left hemisphere of your brain. Mathematics, Japan and genius. Part of a documentary about the amazing Daniel Tammet.
The second video is aimed at your right hemisphere. So much beauty and so many ways to invoke it. Imogen Heap knows a few of them.
The other day I
wanted to have an overview of the size of a software project I'm working
on. The project is relatively big and involves quite a few languages and
technologies spread among different tiers. Because I just joined the
team there are tons of lines of code already written that I have not
even seen. So I felt the need to have at least a grasp of the size of
the codebase for each language and learn how programming languages
compare among them within the project. I came up with this very simple
Bash script,
getSizeStats.sh
.
It expects one or more directories as parameters. It finds all regular
files contained in the trees that hang from those directories. It then
adds up LOC for all files, grouping by the extension of the filenames.
The script assumes that the arguments are, or might be, local copies of
Subversion repos (that's why it excludes .svn
directories). While
running, the output line shows a counter for the number of files as they
are processed. Once finished, a list of LOC for each language (i.e. file
extension) sorted by LOC is created in /tmp/getSizeStats.sh.out
.
#!/bin/sh
TMP_DIR=/tmp/basename $0
TMP_OUTPUT_FILENAME=/tmp/basename $0
.tmp
OUTPUT_FILENAME=/tmp/basename $0
.out
if [ -d $TMP_DIR ]; then rm $TMP_DIR/* 2> /dev/null else mkdir $TMP_DIR fi
COUNTER=0
find "$@" -name "." | grep -v \.svn | while read j; do
if [ -f "$j" ]; then
cat "$j" >> $TMP_DIR/echo $j | rev | cut -s -d "." -f 1 | cut -d "/" -f 1 | rev
COUNTER=$((COUNTER + 1))
echo -en "\r$COUNTER files "
fi
done
if [ -f $TMP_OUTPUT_FILENAME ]; then rm $TMP_OUTPUT_FILENAME fi
for i in ls $TMP_DIR
; do
echo -e "wc -l $TMP_DIR/$i | cut -d " " -f 1
$i\twc -l $TMP_DIR/$i | cut -d " " -f 1
" >> $TMP_OUTPUT_FILENAME
done
sort -nr $TMP_OUTPUT_FILENAME | cut -d " " -f 2- > $OUTPUT_FILENAME rm $TMP_OUTPUT_FILENAME
echo processed -- see $OUTPUT_FILENAME
(I think that for some versions of echo
you'll have to remove the
option -e
or it won't work properly). The only serious problem I found
were filenames containing blanks and other characters that usually need
to be escaped (bad naming, I know — it wasn't my idea). I played with
different types of quoting and tried to find a workaround for that.
Real-time help about that from
@enlavin
and
@nauj27
was much appreciated. I tried that find -print0 | xargs -0 …
thing but
couldn't make it work as I needed. Eventually the while read j; do …
approach worked. (I confess that I still get confused easily by the
subtle differences between quoting variants and how variables get
expanded in each case. I ought to find some time to learn that well,
once and for all). Now there are so many things to improve here. First
of all, the script does not tell binary files from text files, i.e. you
will also get counts of “lines of code” for all binary assets within
your project, such as object files and images. It should also discard
all text files that are not source code, e.g. a CHANGELOG
. It should
be robust to case variations, i.e. group .java
and .JAVA
files
together. It should rely on something more sophisticated than filename
extensions to tell programming languages, because you probably want to
count your .cpp
and .c++
files as a whole. I was planning to better
it adding those fixes/improvements and others. Then
Golan told me of
sloccount
,
a command that does just what I need. But proper. Here you have an
example of how getSizeStats.sh
works. After re-inventing the wheel, I
couldn't but run my own script… against the source code of
sloccount
itself.
$ svn co https://sloccount.svn.sourceforge.net/svnroot/sloccount sloccount-src > /dev/null $ ./getSizeStats.sh sloccount-src/ 38 files processed -- see /tmp/getSizeStats.sh.out $ cat /tmp/getSizeStats.sh.out c 4493 orig 3899 html 3032 1 235 dat 197 l 171 rb 152 lhs 59 spec 56 h 50 CBL 31 php 27 inc 23 pas 21 hs 19 gz 10 f 10 cs 8 f90 7 cbl 4 tar 1